A propósito del Estudio de Riesgos (ER) realizado en la precordillera de La Florida por encargo de la municipalidad, queremos compartir nuestras razones para sostener que el bosque Panul continúa en peligro de muerte, y que bajo una falsa apariencia de protección, se está preparando un traje a la medida para nuevos negocios inmobiliarios, -distintos de la venta de viviendas- pero igual de lucrativos y devastadores.
1. La modificación del Plan Regulador Comunal (PRC) que debía proteger el bosque Panul ha fracasado por obra del alcalde Rodolfo Carter y su asesor urbano Esteban Yuretic.
Como vecinas y vecinos organizados hemos impulsado desde 2008 una estrategia para la expropiación del fundo el Panul a través de dos argumentos: (a) el enorme valor ambiental del bosque nativo de la precordillera y (b) el riesgo para la vida de las personas que significa la expansión urbana sobre este territorio.
En 2011, el municipio, sobrepasado por la comunidad que llevaba años exigiendo la protección del Panul, se compromete a hacer un “Estudio de Riesgos y Protección Ambiental” (ERPA), para cambiar el Plan Regulador utilizando ambos argumentos (a) y (b).
Finalmente, durante el mes de marzo del presente año, se ha publicado el estudio y nos encontramos con que éste no incorpora las áreas de valor natural (a) en sus resultados, sino sólo riesgos (b), debido a instrucciones directas que el asesor urbano impartió al profesional contratado para el estudio, el geógrafo Francisco Ferrando.
Así, la municipalidad mantiene su propuesta inicial, que si bien restringe la construcción de casas, permite que el terreno pueda subdividirse en parcelas de 1 hectárea, despejando el camino para la realización de otros proyectos, como la construcción de gimnasios, canchas, piscinas, tiendas y cafeterías, con sus respectivas calles, estacionamientos, tendido eléctrico, alcantarillado, etc. Estas edificaciones podrían alcanzar los 12.000 m2, lo que significa que la destrucción del Panul no es una amenaza superada.
2. Cualquiera sea la propuesta final de la municipalidad, ésta debe someterse a decisión popular mediante un plebiscito.
Debido a un cambio de normativa realizado por el gobierno anterior (agosto 2013) ya no es necesario que proyectos como los que pretenden realizarse en el Panul ingresen al Servicio de Evaluación Ambiental. Si no se incorpora ahora mismo el valor ecológico del bosque en el Plan Regulador, la precordillera y su bosque quedarán a merced de las inmobiliarias.
La municipalidad será el único organismo público que tendrá la oportunidad de evaluar ambientalmente un proyecto en el Panul. Si las autoridades hacen un mal trabajo y no incorporan las variables ambientales al PRC, la ciudadanía debe tener la oportunidad de manifestar su voluntad en contra de esta modificación, mediante un plebiscito que obligue al municipio.
3. La vía municipal para proteger el Panul está agotada. No queda otro camino que la expropiación para entregar la gestión de este territorio a la comunidad.
A través de estos años hemos aprendido que, más allá de cualquier modificación al PRC, lo central del conflicto recae en quién tiene la propiedad del territorio, ya que si la voluntad del dueño es conservar el bosque nativo, esto se haría independiente de lo que digan las leyes.
Por esto, el Panul estará a salvo solo cuando se recupere la propiedad en favor de la comunidad. Si existe voluntad política desde el actual gobierno, gran parte de la precordillera de la Florida podrá ser expropiada y entregada para su gestión a los cientos de vecinas y vecinos que trabajan para consolidar el proyecto de parque comunitario que actualmente mantiene con vida nuestro bosque.
4. La defensa del Panul no es una lucha técnica, ni jurídica, ni político-partidista, sino una reivindicación de nuestra dignidad elemental.
Por todo lo que aquí advertimos, hemos iniciado una campaña social para provocar las acciones necesarias del poder público. Hacemos un llamado a los senadores y diputados del distrito, y a todos los funcionarios del Estado, para iniciar urgentemente la expropiación del Panul.
A quienes se sientan parte de este movimiento en red, decimos que ninguna modificación institucional pondrá a salvo nuestro bosque en forma definitiva. Siempre estará el peligro de que vengan otros proyectos, incluso más ambiciosos y destructores. Lo único que garantiza la vida del Panul es que seamos capaces de formar una comunidad vigilante, organizada y consciente de su responsabilidad con el territorio.
NI UN BOSQUE NATIVO MENOS
NO MÁS LUCRO CON NUESTRA VIDA
EXPROPIACIÓN DEL BOSQUE PANUL AHORA
www.redprecordillera.cl
Marzo 2014