La familia Navarrete Rolando, cercana a Pinochet y que “adquirió” el Fundo Panul a un precio irrisorio en dictadura (un millón de pesos, hoy 20 millones), demandó a la comunidad que defiende el bosque, a través de un recurso de protección.
Este recurso buscaría impedir que la comunidad pueda ingresar al bosque y proteger el ecosistema, algo que realizan miles de personas cada mes, lo que consolida al parque Panul como un importante y necesario pulmón verde para Santiago