La actividad permitió a los integrantes de la Red por la Defensa de la Precordillera adquirir conocimientos que les permitirán provocar el menor impacto posible en visitas a entornos naturales, prolongando su protección y conservación.
Quebrada de Macul, Santiago de Chile, sábado 25 de agosto de 2012.
Guiados por Hernán Donoso - ex presidente de la Federación de Andinismo de Chile - integrantes de la Red por la Defensa de la Precordillera visitaron el Parque Natural Quebrada de Macul, con el objetivo de compartir conocimientos y experiencias en torno a los 7 principios de No Deje Rastro, los cuales permiten proteger lugares naturales. Estos principios son:
- Planifique y prepare su viaje con anticipación: Considere cada aspecto del viaje, esto incluye, el clima, tiempo de permanencia, la alimentación apropiada entre otros elementos como: conocimiento geográfico del lugar y la preparación físico/psicológica de los visitantes.
- Viaje y acampe en superficies resistentes: Minimice el impacto generado por el pisoteo de manera de dañar lo menos posible la vegetación presente y evitar la erosión en el suelo. Respete los senderos ya establecidos y no genere otros, de encontrar uno recién creado, en lugar de comenzar a utilizarlo, deje que la vegetación recupere el lugar.
- Disponga de desperdicios de la manera más apropiada: La basura que se lleva a un lugar natural también se puede – y se debe – regresar al origen, pues entre otras cosas daña el entorno incluyendo aquellos desechos orgánicos como las cáscaras de fruta, ya que cambian la acidez del suelo en donde son depositadas. Lo único que debe descomponerse en un lugar natural, son los componentes propios del lugar, como por ejemplo la hoja de litre en el caso del Bosque Panul.
- Respete la fauna silvestre: Trate de reducir su impacto sonoro al máximo, pues ahuyenta a las aves, no utilice todos los cursos de agua, pues los animales beben de esos lugares, tampoco los mate ni los alimente. Evite visitar la naturaleza con perros, pues ahuyenta a los animales silvestres y puede dañar a otros visitantes, y si lo hace, manténgalos con correa. Ayude a detener la destrucción debido a la introducción de especies ajenas al lugar, en algunos casos Ud. puede hasta eliminar especies exóticas que se han establecido en las áreas naturales protegidas.
- Minimice el impacto de fogatas: Prefiera el uso de cocinillas, pues además no dañan la tierra, además cocinan muy rápido y no dejan rastro. Pregúntese si una fogata es realmente necesaria, en la temporada de verano en la región metropolitana por ejemplo, se hace innecesaria – y hasta irresponsable – la realización de fogatas, y si de verdad necesita hacerla – porque alguien se encuentra con hipotermia por ejemplo - aplique las 9 técnicas que permiten un buen manejo de estas.
- Considere a otros visitantes: No realice actividades que lo favorezcan a Ud. pero perjudiquen las de otros, respete a los cuidadores y otros usuarios del lugar. Cuide el entorno y maximice la sensación de estar rodeado de la naturaleza.
- Deje lo que encuentre: No tome plantas ni rocas del lugar, así como tampoco artefactos arqueológicos u herramientas que pudiesen pertenecer a otras personas. No corte árboles ni ramas de árboles vivos. Evite recoger flores y frutos, pues daña a las plantas y la supervivencia de las mismas y de su hábitat.
Todos estos principios deben ser aplicados de mano del sentido común, permitiendo una armonía en los espacios utilizados, integrando los diversos usos y la naturaleza de los lugares que visitamos.