Ha pasado un año desde que la Intendenta de Santiago, Karla Rubilar, se comprometiera a proteger el Bosque Panul, a través de la elaboración de informes -como la tasación de los predios-, gestiones que hasta la fecha no se han realizado. Esta situación mantiene totalmente desprotegido y en peligro el último pulmón de vegetación nativa dentro del radio urbano de Santiago. La comunidad solicita al actual gobierno que cumpla sus compromisos, y que proteja los bosques que sobreviven alrededor de la ciudad y que sostienen la vida, sobre todo ante el complejo escenario global.
Después de varios intentos fallidos para reunirse, la comunidad que defiende el Bosque Panul logró presentar a la Intendenta de Santiago, Karla Rubilar, en octubre del 2018, los argumentos para proteger este valioso ecosistema.
Se expuso que lamentablemente, a nivel local, el alcalde de la Florida, Rodolfo Carter, no ha querido proteger el Bosque Panul ni la precordillera de la comuna.
Esto permitió, por ejemplo, que los dueños del Fundo Panul continuaran contaminándolo con arena de mar y desperdicios marinos.
En la reunión se conversó sobre los trece años que la comunidad lleva solicitando y exigiendo su protección, algo a lo que se han comprometido todas las autoridades, pero que ninguna ha cumplido.
La Intendenta escuchó nuestros argumentos, y se comprometió a proteger el Bosque Panul “le duela a quien le duela”. Para ello, se levantó una “mesa técnica” de trabajo, con miembros de distintos ministerios que tendría sus resultados en diciembre del año pasado, pero a la fecha no hemos visto ningún informe, ni propuestas.
Esta mesa de trabajo se comprometió a generar los siguientes documentos: un informe sobre la situación legal actual y las vías para proteger el Panul (dejando en claro que la única alternativa posible es la expropiación del Fundo Panul, Zavala y Santa Rosa, a precio justo, para convertirlos en un Parque Nacional y Comunitario), y una tasación oficial de estos fundos, a valor de mercado (no como la que hizo el anterior gobierno con el Intendente Orrego, que fue “a valor del privado”). El Gobernador Provincial se comprometió a solicitar un informe al Municipio de la Florida, para consultar porqué ha mantenido desprotegido el bosque.
Recordemos que la principal excusa que han expuesto las autoridades para proteger el Panul es supuestamente, su “alto” precio. Los dueños del Fundo Panul exigen al estado 40 mil millones de pesos para comprar o expropiar su parte. Lo irónico de ello es que estos mismos dueños (la familia Navarrete Rolando, dueños de OXIQUIM) se adjudicaron en un remate a “único postor” en plena dictadura (1978) a un millón de pesos el Fundo Panul, algo como 17 millones de pesos al valor del día de hoy.
Sin embargo, el Estado y los distintos gobiernos, tanto locales como centrales, han decidido no investigar este robo cometido contra Bienes Nacionales, y la respuesta entregada a la comunidad para no protegerlo, ha sido precisamente su “alto precio”. Pero hay una injusticia tremenda en esto, es una herida abierta de nuestra historia, y, además, se cruza con otro importante problema urbano, ¿quién fija el valor del suelo en Chile?
En este caso, el privado especuló con el valor del predio. Para ello creo empresas falsas, que se vendieron entre sí el Fundo Panul, desfigurando totalmente su valor inicial. Pero el Estado cuenta con herramientas suficientes para proteger estos ecosistemas y pagar lo justo. Esperamos que las autoridades entiendan la emergencia ambiental en la que estamos inmersos, y declaren toda la precordillera y cordillera de Santiago un gran Parque Nacional.
A la fecha, la mesa técnica aún no ha entregado ningún documento ni avance, y la Intendenta Rubilar no se ha referido al tema, a dos meses de dejar el cargo para presentarse como candidata a gobernadora.
Mientras tanto, el Bosque Panul continúa en peligro de ser destruido, siendo protegido solo por la comunidad.
Red por la Defensa de la Precordillera.
Sepiembre, 2019.